La amistad

Para muchos filósofos de la antigua Grecia, la amistad era un tesoro, proporcionaba experiencias duraderas y muy agradables.

Aristóteles decía que :”la vida política debe promover la amistad, pues si uno desea que los hombres no se traten injustamente, basta con hacerlos amigos”. Sería bueno invitar a los políticos del mundo a leer a este filósofo seguramente habría menos confrontación entre entre ellos y mayor interés por la comunidad. 

Estoy segura que la amistad sincera y desinteresada contribuye con muchos aspectos del ser humano.

En primer lugar, el contar con alguien que te ama sin condiciones, que bien puede ser tu padre, madre, hermanos, abuelos o un verdadero amigo, te hace sentir seguro y feliz. En el caso de los familiares, estos no los elegimos, pero a los amigos, sí.

Conocer a fondo a las personas y las cosas, creo que nos acerca a la felicidad y creo que parte del arte de vivir es descubrir a un amigo que pueda ser parte de ese placer.

Creo que así como nos resulta agradable la sensación de estar vivos, nos resulta grata la compañía de nuestros amigos. El desarrollar una relación armoniosa con otros y con nosotros mismos es parte de nuestra esencia.

Para muchos la amistad es la forma fundamental de toda comunidad humana que no es solamente natural sino también espiritual.

La amistad es una relación entrañable, libre, recíproca y exigente, desinteresada que nace de la inclinación natural y se alimenta del compartir cotidiano. Este compartir no se ve impedido por la distancia física, pues hoy con el desarrollo de la tecnología, la amistad traspasa las fronteras.

Con los amigos compartes no solo situaciones felices, sino también dolorosas. Se puede compartir alegrías y momentos tristes, ser cómplices y  consejeros,  el que tiene la dicha de tener un amigo sabe que el otro siempre esta allí.

Si bien se puede considerar diversas situaciones amistosas en diferentes etapas de nuestras vidas, no quiere decir que siempre se haya creado el lazo amistoso pues debe haber existido el sentido de pertenencia y un vínculo entre los ambos y un consentimiento de que así sea.

Cuando se tiene una amistad, se espera del otro un consejo, aceptación sin juzgar.

Y es que la amistad existe desde antaño. La Biblia nos relata varias historias de amistades entrañables. Pienso en la que tenía Rut y Noemí por estas extraordinarias palabras de Rut:”No insistas más en que te deje, alejándome de ti. Donde tú vayas iré yo. Donde tú habites, habitaré yo. Tu pueblo será mi pueblo, y tu Dios será mi Dios. Y que Dios me castigue si algo que no sea la muerte me separa de ti”.

Podemos tener de todo pero si nos falta la amistad en la vida nos privamos de ese placer de compartir sueños, alegría, ternura, cultura, honestidad, sinceridad, problemas, logros, triunfos, en fin innumerables atributos. Y esto no solo aplica para viejas amistades sino para nuevas también. Como la intimidad requiere tiempo y es difícil, no es posible ser amigo de muchos con amistad perfecta. En cambio, por interés y por pasarlo bien es posible tener bastantes amigos, pues ambas condiciones las reúnen muchos y no requieren de demasiado tiempo.

La amistad es desinteresada y enriquecedora. Quién comienza a ser amigo por interés, por interés dejara de serlo y despoja a la amistad de su verdadera belleza.

El querer desinteresado, es el primer beneficio de una verdadera amistad. Tener el privilegio de contar de la compañía de los amigos y de tomar lo mejor, lo más inteligente o lo más divertido, te hace preguntarte que haces entre los mejores.

La carencia de amigos y la soledad es lo más terrible, porque toda la vida y el trato voluntario se desarrolla entre amigos: pasamos la mayor parte entre familiares y los amigos o con los hijos, padres, esposo (a).

El hombre es un animal social y por naturaleza necesita convivir. Incluso la persona más intratable necesitará de un amigo para vaciar toda su aspereza.

La amistad es fruto del convivir compartiendo. Los amigos comparten proyectos, gustos, puntos de vista, entre otras cosas. De hecho la amistad nace cuando dos compañeros o más descubren que tienen algo en común.

Hablando de amistad quiero decirles que hoy cuento con un grupo de amigas genial. Se trata de mis compañeras y amigas de graduación de secundaria. Lo traigo a colación porque merecen que hable de ellas y porque es un grupo de diversidades. Tenemos aproximadamente la misma edad, gustos diferentes, misma creencia en Dios Nuestro Creador, proyectos e incluso estamos distantes físicamente. Pero todos los días, a través de mensajería cibernética nos mantenemos comunicadas. Así todas sabemos de lo que pasa en la vida de cada una. Se comparten alegrías pero también se comparten penas, apoyo moral y espiritual y muchas veces, físico porque nos hemos ayudado a conseguir medicinas y otras cosas que necesitemos. Y los cumpleaños? Cada vez que alguna cumple años, es día  de fiesta nacional y hasta se hacen fiestas virtuales.

No puedo evitar hablar de otras dos amigas entrañables, mis hijas, con las cuales he compartido muchas cosas de mi vida y yo las de ellas.

Me siento privilegiada chicas de contar con su amistad! Las amo

Voy a finalizar este post citando a Aristóteles:” Amistad es, en efecto convivir, y desear para el amigo lo mismo que para si. Y aquello en lo que ponemos el atractivo de la vida es lo que deseamos compartir. Por eso, unos beben juntos, otros disfrutan con el mismo juego, o practican el mismo deporte, o salen a cazar, o charlan sobre filosofía.

Espero les haya gustado, esperamos tus comentarios!

Autor: Andreina Dommar

Equipo de Vive Genial